Qué pasaría si alguien nos dijera que hay un dinero cuyas unidades disponibles pueden ser conocidas con facilidad. No sólo eso, sino que podría conocerse con antelación la cantidad de unidades que habrá en un mes, un año, o diez años. Pues aquí estoy yo diciéndolo, y dándote la bienvenida a Bitcoin. Bitcoin es el primer activo en la historia de la humanidad con esta característica, lo que lo convierte en un hito muy importante desde el punto de vista económico. Cada cuatro años somos recordados de esta realidad.
Voy a comenzar este artículo con otras preguntas: ¿Cuántos dólares estadounidenses se han emitido desde su creación? ¿Cuántos en el último año? ¿Cuántos euros, pesos argentinos o bolívares venezolanos se han emitido? Estas son preguntas para las que la mayoría de la población no tendrá la respuesta inmediata aunque la información esté, en teoría, a disposición. Y si nos preguntamos ¿Cuántos dólares, pesos, euros o bolívares se emitirán el próximo mes? Ni hablar si nos preguntásemos lo mismo para los próximos cinco o diez años; ya nadie podría brindar una respuesta con total certeza. Habrá planes y expectativas, especialmente en aquellos responsables de dicha emisión, pero deberíamos confiar en que se cumplan. Tenemos frente a nosotros preguntas muy importantes ya que determinan la cantidad total de alguna u otra moneda que la población utiliza para comerciar. Esa oferta monetaria tendrá un papel fundamental en el poder adquisitivo de cada unidad de dicha moneda, afectando de manera directa aquellas economías en donde se utilicen.
Qué pasaría si alguien nos dijera que hay un dinero cuyas unidades disponibles pueden ser conocidas con facilidad. No sólo eso, sino que podría conocerse con antelación la cantidad de unidades que habrá en un mes, un año, o diez años. Pues aquí estoy yo diciéndolo, y dándote la bienvenida a Bitcoin. Bitcoin es el primer activo en la historia de la humanidad con esta característica, lo que lo convierte en un hito muy importante desde el punto de vista económico.
Desde el momento de su creación y puesta en funcionamiento, la política de emisión de Bitcoin quedó definida en su código de programación inalterable hasta el día de hoy. Esta lógica inscripta en su funcionamiento es lo que nos permite saber cuántos bitcoins se han emitido y cuántos se emitirán a futuro. ¿Qué tiene que ver todo esto con el «halving»? Ya llegaremos.
¿Cómo se crean nuevos bitcoins?
La red de Bitcoin crea nuevas unidades cada 10 minutos (cuando se crea un «bloque»). La cantidad máxima de monedas a crear está predefinida, siendo 50 al momento del inicio de la red allá por 2009. Es decir que en esa época se creaban 50 bitcoins cada 10 minutos, o 7.200 por día. Las reglas de Bitcoin establecieron también que cada 4 años (210.000 bloques) esa cantidad se reduciría a la mitad, entonces luego de pasados 4 años se crearían 25 bitcoins cada 10 minutos, luego 12,5 bitcoins cada 10 minutos, y así. Si extrapolamos este funcionamiento se vuelve muy sencillo calcular cuántos bitcoins se habrán emitido en una fecha seleccionada a voluntad en el futuro.
Este hito en el que el ritmo de emisión de bitcoins se reduce a la mitad, y que sucede cada 4 años, es llamado halving. De esta manera respondo la pregunta que nos trajo hasta aquí… cinco párrafos más tarde.
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Fuente: https://river.com/learn/who-creates-new-bitcoin/
Hecha toda esta explicación no puedo combatir mi necesidad de ser preciso en la explicación y aclarar que el intervalo de 10 minutos es aproximado. La red de Bitcoin se auto-coordina para lograr que el intervalo se mantenga constante en el mediano y largo plazo, pero debido al funcionamiento de la minería de Bitcoin la realidad es que dicho intervalo objetivo termina siendo siempre una aproximación. Prueba de eso son las fechas en las que ocurrieron los halvings:
- Inicio de la red: 09/01/2009
- 1er Halving: 28/11/2012
3 años y 10 meses desde el inicio de la red. - 2do Halving: 09/07/2016
3 años y 7 meses desde el halving anterior. - 3er Halving: 11/05/2020
3 años y 10 meses desde el halving anterior. - 4to Halving: 20/04/2024
3 años y 11 meses desde el halving anterior.
Las fechas no se separan cada 4 años de manera exacta. Sin embargo, a los fines prácticos pensar en 10 minutos entre bloques, y 4 años entre halvings, es más que suficiente.
¿Qué pasa luego?
A esta altura del artículo más de uno se habrá preguntado cuántos bitcoins se están creando en este momento, y otros ya habrán hecho la cuenta (porque lo maravilloso de Bitcoin es que pueden hacerla). Al momento de escribir estas líneas se generan 6,25 bitcoins cada 10 minutos. Luego del 19 de Abril de 2024, si todo sigue como se estima, se comenzarán a generar 3,125 cada 10 minutos. Así podríamos seguir avanzando y podríamos preguntarnos ¿hasta cuándo podemos seguir dividiendo el ritmo de emisión a la mitad? Si partimos de la base de que un bitcoin se puede dividir en 100.000.000 unidades llamadas satoshis, y estas son la expresión más pequeña, entonces podríamos calcular que llegado el año 2140 ya no se crearán bitcoins en nuevos bloques.
¿Qué significa esto? ¿Se acaba bitcoin?
Por supuesto que no, los bloques seguirán creándose cada 10 minutos y la red seguirá avanzando. Lo que significa simplemente es que todos los bitcoins que se hayan emitido hasta el momento serán todos los existirían, y nos referimos al (famoso) total de 21 millones de unidades. O, para mantener la rigurosidad numérica 2.099.999.997.690.000 satothis (si, los curiosos están invitados a hacer las cuentas). Existen diferentes teorías sobre cómo se desenvolverá Bitcoin y el mercado para ese entonces, pero sólo las próximas generaciones podrán verlo. Aún así, vale la pena aclarar que al día de hoy ya se han emitido poco más del 93% del total de bitcoins que existirán, lo que nos da una muestra clara de que el ritmo de creación es asintótico.
¿Por qué el halving es importante?
El halving como evento cuatri-anual nos marca la entrada a un nuevo período en donde la oferta de Bitcoin se limita aún más. Muchas veces se dice que Bitcon introdujo la escasez digital o la escasez absoluta. Si bien algo de cierto hay en esa afirmación, lo correcto es hablar de oferta limitada. La escasez en economía es una función de la oferta y la demanda, depende de ambas. En este sentido Bitcoin afecta la oferta de una forma que ningún activo económico antes que él lo había hecho: predeterminándola y poniéndole una cota superior. Satoshi Nakamoto, el creador anónimo de Bitcoin ahora desaparecido, tuvo la intención de emular el oro al pensar Bitcoin en este aspecto.
Además de la predictibilidad, hay otro aspecto relacionado al halving y a la política de emisión de Bitcoin que, a mi criterio, es el más importante: la política no puede modificarse. Está exenta de caprichos o decisiones arbitrarias de un grupo selecto de personas, es inmune a manipulación. ¿Quiere decir esto que es imposible que este mecanismo de generación de bitcoins sea modificado? ¡Excelente pregunta! La respuesta técnica es que sí, puede ser modificado, justamente porque se trata de software, ni más ni menos. Lo que mantiene a esa política de emisión inamovible es la naturaleza anárquica de la red de Bitcoin. Aquí no hay dueños, jefes o líderes con poder de cambio, sino que cada miembro de la red tiene autonomía total de adherirse a las reglas de Bitcoin que mejor le sienten. Por supuesto que aquellos miembros que no respeten las mismas reglas, no podrán interactuar entre ellos. Esto nos lleva a la conclusión de que es de interés de cada participante de Bitcoin el asegurarse de que haya consenso en las reglas que todos toman como válidas, ya que de otra manera la red quedaría partida y los bitcoins de una parte no serían válidos en la otra y viceversa. Nadie quiere eso. Esta dinámica muy interesante de decisiones individuales coordinadas hacen que Bitcoin sea un ecosistema donde el consenso es primordial. Si a esto le sumamos el hecho de que la oferta limitada es una de sus mayores propuestas de valor y una parte fundamental de su ethos, podemos afirmar que en términos prácticos estamos frente a un conjunto de reglas de emisión inquebrantables.
Política de emisión predefinida, totalmente predecible, inamovible e inmune a influencia humana individual, es algo nuevo en nuestra realidad económica. Aún estamos descubriendo su impacto en la civilización, pero cada cuatro años el halving es testamento de que, independientemente de lo que pase, la cantidad de bitcoins nuevos son exactamente los que sabíamos que se iban a crear, al ritmo que sabíamos que se iban a crear.